A pesar de una tarde-noche de caos en el Distrito Federal, a causa de la lluvia, y con todo y que no lució el Palacio de los Deportes a toda su capacidad, "El sonero de la juventud", Víctor Manuelle, y "El caballero de la salsa", Gilberto Santa Rosa triunfaron con su concierto "La historia continúa".
Una noche en la que no paró de llover, pero gracias a que está cerrado el "Domo de Cobre", a partir de las 21 horas inició el concierto con la proyección en cuatro pantallas del show que han ofrecido este par de reyes de la música afroantillana, quienes ataviados con trajes grises iniciaron: Santa Rosa, con "La conciencia", y Víctor Manuelle, "Así es la mujer que amo".
De ahí p'al real todo fue baile y ovaciones para los cantantes, que interpretaban un tema sobre otro, como "Un montón de estrellas" y "Se me rompe el alma", de Santa Rosa y Víctor Manuelle, respectivamente.
"Muy buenas noches México, esta es la primera vez que estamos juntos y esperamos que disfruten, gocen y bailen este concierto titulado 'La historia continúa", dijo Víctor Manuelle, quien continuó el show con "Tú volverás".
Después se dejaron escuchar "Me volvieron a hablar de ella" y "Vivir sin ella", de Santa Rosa, quienes ante tal ovación, Víctor Manuelle reconoció la grandeza del "Caballero de la salsa", y continuó con "Pensamiento y palabra".
"Mentira" y "Soledad" fueron los siguientes temas de Santa Rosa, por lo que Víctor Manuelle continuó con los temas especiales para despechados, y antes de "He tratado", dedicó esta canción a un enamorado que había comprado los boletos para estar con su pareja esa noche, pero terminaron la relación, y "ahora ella está aquí con otro y los boletos del que me pidió esta canción".
Con "Maldita suerte" continuó Víctor Manuelle, a quien le lanzaron la bandera de México, la cual colocó en el pedestal y se la llevó al terminar la canción, que dio paso de nuevo en el escenario a Santa Rosa y "Perdóname", que hizo que ambos improvisaran utilizando el tema "Quítate tú pa' ponerme yo".
"Dile a ella", "La agarró bajando", "Qué hubiera sido de mí", "Conteo regresivo", "Hay que poner el alma" y "Que alguien me diga", fueron los temas finales y con el que bromearon pidiendo la "otra, otra", para volver ambos, y tras una nueva improvisación con "La vida es un carnaval", aprovecharon para pedir el aplauso a sus músicos de la orquesta que los acompañó, desapareciendo para no volver más, con todo y que el público se desgañitó pidiéndoles otra.
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